Aquellos que se quedan o no en invierno a vivir en Tarifa tienen que conocer a Pakito Dutrera y el buen trabajo que hace las noche de los viernes en el Hotel Misiana, que es donde trabajo Ulises. Pakito es el autor del el blog
http://www.porterodenoche.blogspot.com/ faceta escritora que tiene abandonada y que la practicaba hace algunos años con bastante arte. De aqui he sacado este pequeño homenaje a un buen amigo de muchos en Tarifa.
Antes de irse, mi amigo Ulises me pidió que le escribiera un monólogo, los que lo conocisteis sabreis que era muy "payasín" y que estaba loco por montarse en un escenario...me lo pidió varias veces, me sugirió el tema y le dije que sí, que lo escribiría para que él lo representara en Misiana. Sabréis también que era sumamente obstinado cuando deseaba algo...yo siempre le decía que conmigo conseguiría mas con "silencios" que con verborrea... y así lo hizo.
El hijoputa se quedó callado, y aquí está lo prometido, nunca es tarde si la pisha es buena. Va por tí Uli y espero que guste.
El AGOSTO EN TARIFA.
Cuando algún coleguita de toda la vida me dice que se viene pa Tarifa y que lo hace en Agosto siempre le digo lo mismo: tío, vete a tomar por culo!
Y es que joder, que vengan cuando quieran pero no en Agosto, en Agosto no.
Y no os vayáis a creer que les contesto de tal forma sólo mirando por mi interés, no, en parte lo hago por ellos, por su bien, porque está bien claro que el Agosto en Tarifa es un puto agobio, seas residente, turista o windsurfero.
Aún así la gente sigue viniendo en masa en Agosto y nuestro pueblín se llena de coches, de gentes y de ruido. Y si nuestro pueblín no explota es porque, oportunamente y de forma bestial, aparece el viento de levante y arrastra con todo y con todos cuando menos se le espera. Ese viento “que se lleva hasta el número de los zapatos”*.
Pero mientras que el levante llega y no llega hay que sufrir así que lo mejor es conocer a las distintas especies humanas que nos visitan para así poder sobrellevar el Agosto de forma digna y sin cometer ningún asesinato (en masa).
De todas las especies que nos llegan los del “club madrileño” se llevan la palma, por pesados, ojo, que yo nací en Madrid y no me siento aludido, así que tú tampoco, entre otras cosas porque estamos en enero y en enero sí que se agradecen las visitas.
Como iba diciendo, a los del “club madrileño” es fácil reconocerlos de inmediato, no por nada si no porque antes de darte las buenas tardes ya te están soltando el típico y manido: “mira es que soy de Madriz y tal, sabes?…” acto seguido, y después de que un servidor les comunique el precio del café que se han tomado mientras miran a las chicas en bikini, te sueltan: ¡joder que caro, ni en la Gran Vía!
-¿Te parece más bonito el paisaje de la Gran Vía que éste?- le suelto al madriles mientras vuelvo la mirada hacia a las pivitas con el mar de fondo.
-Mirándolo de esa forma, sí que puede que lo merezca, sí- me suelta el madriles.
-Entonces cállate o vuélvete otra vez pa Madriz, cacho cabrón- le suelto yo para acabar la conversación.
El siguiente grupo en peligrosidad y pesadez quizás sean los del “club sevillano”, y digo lo mismo que antes, no te sientas aludido que estamos en enero, “mi arma”.
A este espécimen se le reconoce fácilmente sin necesidad de oírle hablar, su indumentaria es inequívoca y delatora, esto es: camisa a rayas finas remangada a la altura del antebrazo, pantalones vaqueros gastados y “sapatos” náuticos del año la pera. Se les puede ver fácilmente y en manada por el bar “ca´curro” trasegando rebujitos y engullendo secreto ibérico.
Otro grupo a tener en cuenta, cada vez más numeroso y altamente peligroso son las despedidas de solter@. Lo mejor en este caso es cambiar de acera o incluso correr cuando estés cerca o te cruces con alguna. Como consuelo nos queda el hecho de que jugamos con ventaja puesto que se les ve de lejos; atención si ves alguna polla de latex flotando en el aire o algún tipo vestido de torero, atención y echa a correr porque seguro que se trate de alguna de esas estúpidas celebraciones.
Otro grupo en crecimiento y altamente contaminante en el sentido acústico son los italianos, hordas de jovenzuelos con apariencia “perro flauta” pero a lo spagueti. Normalmente se dedican a invadir sin ningún tipo de piedad el centro del pueblo. Hablan a gritos y no paran de fumar porros de “apaleao” hechos con largas boquillas de cartón. ¡Que hijoputas!
En fin, que venir en Agosto sólo se lo recomiendo a mis enemigos, que con un poco de suerte (suerte para mi) se quedarán atrapados en la caravana de coches, sí, a eso de las siete de la tarde y de regreso de Punta Paloma
Por todo lo dicho: cógete la tabla, cálzate chanclas, bájate un poco los pantalukis (que se te vean los gayumbos) y vente en MAYO…
Y que no se te olvide el perro…pisha.